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Hija de la Luna

este blog

Ya no sé ni castellano.

He estado trasteando con el blog y los enlaces, no sé como lo he hecho pero he perdido el acceso a algunos de vuestros blogs, creo que ya los he recuperado todos, pero si falta alguno (o hay alguna sugerencia para algún nuevo enlace), avisadme, llevo un día despistada del todo...

He hecho una nueva lista de cosas pendientes, aunque dejo a la derecha el acceso a las dos. He descubierto que no logré hacer la mayoría de las cosas de la anterior, así que le tendré que echar más ganas. Por ahora, me conformo con estudiar euskera en mis ratos libres y volverme loca con el CAML. Por cierto, ¿alguien lo ha usado alguna vez en su trabajo? Entre esto y el Pascal, yo ya no sé ni castellano...

La eternidad

Quisiera tener una buena excusa para mi huida, algo que justificara una ausencia tan prolongada, pero no hay nada, aunque yo creyera lo contrario hasta hace bien poco. La estructura de este post viene obligada por las prioridades: primero los agradecimientos, luego los pesares del alma.

Siento una especie de deja-vù al escribir esto. Os agradezco a todos que hayáis seguido visitándome a pesar de mi ausencia, que os preocuparais por mí, que estuvierais ahí, como siempre. Muchas gracias.

No sé muy bien a qué ha venido todo esto. Supongo que demasiadas cosas en poco tiempo acabaron por minar las poquitas fuerzas que tenía. Tengo anemia aguda, así que de cuando en cuando me desplomo, dejando marcas por mi cuerpo que sirven de testigos que nadie ha pedido. Mi tobillo me impide realizar esfuerzos grandes, así que he tenido un verano apasionante jugando al Grim Fandango. Creo que lo que peor llevo es la medicación, estoy deseando acabar ya el tratamiento. Sé que nada e esto es excusa, pero es lo que hay. Ahora tengo ganas de escribir, de leer todo lo que me he perdido, de volver a mirar sin recelo un ordenador. Este es el primer paso. Mañana, el siguiente. Así, espero aguantar hasta el fin de la eternidad.

Pd: estoy leyendo mis viejos libros de Asimov, de ahí el guiño seminconsciente.

Estos días

Reconozco que contrasté la ip con viejos comentarios, reconozco que quise saber quién se preocupaba por esta Luna. Muchas gracias. He dejado mi dirección de email de una vez por todas en la zona de enlaces (en paranoias, ese es el lugar perfecto para mí) y la dejo por si acaso también aquí: Hija de la Luna. No la uso en el Messenger, si alguien quiere agregarme que me deje un aviso en esta dirección y ya le contestaré cuando pueda desde mi dirección personal.

Estos días no escribo ni leo ni nada. Empiezo a acusar el cansancio en los huesos y en el corazón. Sólo quisiera poder dormir, pero el insomnio me está volviendo loca. Mi vida no mejora y yo ya no sé de dónde intentar sacar fuerzas para cambiarla. Pero voy a hacerlo, pronto. Por una vez no hay nada en mí mal, todo es externo, no hay culpa que tiña mis lágrimas de ningún pecado intencionado. Y eso es una gran ventaja.

He abierto un nuevo tema, aunque sé que no tiene mucho sentido no escribir pero llenar de temas la derecha del blog. Pensé en abandonar en paranoias estos artículos, pero cartas que nunca envié es mejor lugar, sin duda. Espero que la primera de estas cartas os ayude a entender porqué he desaparecido estos días…

Por entregas.

Este blog vuelve a ser lo que era. El cine, la literatura, mis paranoias, todo vuelve a los post. He estado mirando nuevos alojamientos para el blog, porque sigo teniendo problemas para escribir llegando incluso a postear desde casa de la vecina (sí, reíros). Por ahora me quedo aquí, pero seguiré trasteando.
Lo primero es renovar la sección de enlaces: el primero es para Samara, con su blog Hija de la Fortuna?, porque se lo ha ganado, con sus genialidades y sus comentarios. Lástima que su blog me odie...
El segundo (para seguir con la casi tradición, esta vez también son 3) es para Marta, una cuentista nata, una posteadora genial, y, por lo que sé, un corazón de oro. Así qu enlace para Galatea.
Tercero y último hasta la fecha para Insomnio de Turandot, otra gran escritora que se merece un huequito entre mis enlaces.
No sé si será por mi nueva perspectiva, si me estará llevando de la mano la euforia o qué, pero he estado jugueteando un poco con el Photoshop. Hemos firmado una tregua, creo que le ha gustado mi proyecto. Consiste en ir publicando poco a poco explicaciones de modelos de origami. El problema es que no sé cómo subir más de una imagen por post. Si alguien me socorre, lo pondré en práctica a figura por artículo, sino irá por entregas...

Cambiar de cara.

Este post es una nota para navegantes despistados. He cambiado el aspecto del blog - y mucho-, y he puesto un nuevo logo, regalo también de Adriana (gracias :D). Aquellos que me tengáis enlazado con el antiguo (gracias también a vosotros!) dejadlo un tiempo, no sé si este aspecto va a durar mucho, porque sigo trasteando con las plantillas.
De lo que más contenta estoy es de haber podido poner por fín la fuente Georgia, me encantan los números: 0123456789...
Bueno, pues voy a quitar el cartel de "obras", hasta que de nuevo me dé por cambiar de cara...

Ahí arriba.

¿Es este blog curioso? ¿Por qué se empeña Google en poner banners con frases del tipo “¿quiere saber la temperatura del sol? En Google encontrarás la respuesta. Datos curiosos Google.”? Si no los habéis visto, pinchad aquí y llegaréis a un cuento curioso, al menos para el programa que decide qué banner poner. Y cuando no sabe cómo catalogar algo, anuncia sitios de creación de weblogs. Éste post, por ejemplo, tiene todas las papeletas para ello. A ver si me molesto en enviar algo de dinero a Blogia y lo quito sin remordimientos de conciencia, que empiezo a estar harta de verlo ahí arriba.

Logo

Logo logo

El aspecto de esto.

Gracias a Adriana, ya tengo un logo. Algo menos en la lista... He estado probando cosas nuevas, y he cambiado unas cuantas veces la forma del blog. Lo siento si a alguien le ha pillado en medio... Al final he acabado igual que estaba, qué se le va a hacer. Debe ser que me ha acabado por gustar el aspecto de esto...

En un principio.

Si la realidad de cada día se va filtrando a mis letras, si cada cosa que me pasa acaba influyendo en mis post, ¿cómo evitar que esto no sea tan personal? Porque eso pretendía cuando empecé, y ahora me releo y sé que si fuera un observador externo, podría conocer mi vida, mi mundo. Mi ciudad está aquí también, y su nombre es fácilmente deducible. Mis sentimientos se volcaron post atrás, y ya hay más de mí aquí de lo que saben muchos de mis amigos. Y me gusta, no sé porqué, pero es así. Quizá sea que estos desahogos ocasionales me ayudan a mantener la serenidad, no lo sé, o quizá esté más loca de lo que creía en un principio.

Ya tengo estadísticas.

Gracias a la ayuda de las instrucciones de BLOGIA, he conseguido meter ese pequeño enlace de la izquerda, y con imagen y todo. Bueno, la verdad es que me mandaron el email de netscat con las instrucciones claritas... El problema con el resto de los enlaces, sin embargo, persiste: no soy capaz de coger la url de la imagen para poner. Nada, que no tengo remedio. Al menos, ya tengo estadísticas...

Si es que la tecnología y yo...

Por fín he arreglado mi ordenador. Ya no tendré que estar de okupa en la casa de nadie para publicar o, simplemente, para bajarme los apuntes del servidor ftp de la facultad. Ya era hora, porque mis amigos empezaban a mirarme con desconfianza cada vez que decía que los pasaba a recoger, y eso que yo soy la que vive más lejos y siempre hemos hecho ronda de casa en casa para salir. Ahora que ya tengo eso solucionado, no logro poner en el blog los enlaces. Me explico: si se pincha en los enlaces del menú de arriba, va, pero no logro que se muestren en la izquierda de la pantalla. Nada, que seguiré experimentando, tampoco es que lleve mucho en esto, aunque no me sorprendería si no lograra hacerlo. Si es que la tecnología y yo...

Mi primer post

Aquí estoy, delante de mi ordenador, creando mi primer post, plasmando mis ideas por primera vez en algo q no es papel, en algo que q no puedo tocar en realidad, y ni siquiera sé por qué lo hago. Llevo escribiendo lo que se me pasa por la cabeza desde que era niña, contándome a mí misma historias inventadas, pensamientos peleados con la realidad, y mi propia vida pasada por el filtro de los desequilibrios que me acompañan, pero de ahí a contarselo a todo aquel que quiera leerlo, va un trecho. Y no soy de esos que dicen escribir su blog sin importarles si lo lea alguien o no. Supongo que mi ego desea ser leído, sino, ¿para qué escribir? En mi contra está la informática. Qué se le va a hacer, los aparatos electrónicos y yo no nos llevamos bien; a mi favor, mis ganas de dejar de amontonar servilletas de la cafetería de la facultad, que ya empieza a resultar engorroso explicarle a mi madre cómo puedo llegar a acumular tantas en los bolsillos de los vaqueros si, para ella, me paso las mañanas en clase. Así que aquí estoy, con la estructura y el título del weblog aún sin diseñar, y pensando sin embargo en cómo será mi proximo post, que me temo verá la luz en breves minutos, qué le voy a hacer. Y es que éste sólo ha sido una presentación, y a la vez un agradecimiento a aquellos que hacen posible que los locos como yo podamos colgar nuestros penamientos, pero no puedo evitar querer verter estos ya. Así que, sin más, aquí dejo mi primer post.